La nueva colección de Calvin Klein está llena de sueños y promesas

Desde el nombramiento de Raf Simons como director creativo de Calvin Klein, temporada tras temporada, esperamos con ansias su presentación. Y como es de imaginar, su más reciente –Primavera 2018- no fue la excepción. Realizada en la sede global de la compañía, ubicada en la dirección 205 West 39th Street, la colección Calvin Klein 205W39NYC Primavera 2018 se encuentra inspirada en el cine, en la fábrica de sueños de Hollywood y en sus representaciones tanto de una pesadilla americana como también del todopoderoso sueño americano.

Heroínas de thrillers, héroes y antihéroes. Los códigos estéticos de protagonistas de películas se mezclan de manera ilimitada, otorgando a sus significados una nueva interpretación y celebración. A partir del mismo material de origen, pero creado de manera separada, la instalación específica del sitio, elaborada por el artista Sterling Ruby para la pasarela Primavera 2018, resalta estos temas. El trabajo utiliza como base la instalación de la pasarela previa Otoño 2017, de la misma manera que la colección utiliza el cimiento establecido por su colección predecesora – un nuevo vestuario, de arquetipos americanos.

Las «pistas» del horror, pero también de los sueños, inspiraron la colección. Aquí, nunca hay horror sin belleza. El vocabulario visual distintivo del cine, de símbolos y signos, es recortado, re contextualizado y re ensamblado, para crear una pluralidad de vestidos. Múltiples interpretaciones simbólicas de la imagen de los thrillers se combinan en trajes únicos, creando nuevos conjuntos. Son «editados» – como una película – para definir una nueva narrativa. «Se trata del horror americano y la belleza americana», comenta Raf Simons. «La moda trata de ocultar el horror y abrazar sólo la belleza. Pero ambos son parte de la vida. Esta colección es una celebración de eso: una celebración de la vida americana”.

Siluetas de alta costura de Americana, de mediados de siglo, se traducen a industrial, se reiteran en nylon, caucho (especialmente moldeado en Ohio) y cuero pintado a mano. Chaquetas de cuadros estilo leñador se utilizan para los trajes de hombres hechos a medida. Los pompones son reapropiados para vestidos con flecos, bolsos o llaveros, y los camisones se convierten en trajes de noche. Las superficies de los materiales están alteradas, selladas con caucho, desvanecidas y salpicadas. Los colores dominantes de la colección son naranja seguridad, amarillo, negro y abrumadoramente, el rojo.

Mallas, camisolas de seda, caucho contra la piel. Éstas hacen referencia a una corporeidad que habla tanto de la sexualidad como de la mortalidad. El linaje de estas películas se remontan a los mitos urbanos, a los cuentos cautelares puritanos que advierten a los adolescentes de los peligros de la transgresión moral y los peligros de la sexualidad juvenil – y la historia de Calvin Klein está atada a la sexualidad transgresora. En sí, una colección para ser descubierta, una y otra vez.