Escrito por Guadalupe Apú Hidalgo
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Un doctorado en Poéticas de la Escena en la Universidad conocida como UNICAMP en Brasil, asociada a LUME teatro, es lo que mantiene ocupado en este momento al artista Janko Navarro. Él se dio la vuelta por Costa Rica en abril para traer el espectáculo El Funeral, después de haber estado en Montevideo Uruguay y también en el Amazonas en el II encuentro de un grupo de danza, entre otros.
Expresó Janko que la creación de este espectáculo surgió por necesidad personal, ya que hace tres años está en Brasil y se ha visto únicamente estudiando, pero lejos de la práctica, comenzó gracias a un regalo que le dio una escritora nicaragüense del cuento El Funeral, luego fracasó en el intento por interpretarlo tal cual lo recibió, esto por ser un cuento, más adelante cambio la narrativa y el estilo y finalmente se enfrentó con las herramientas de actor, sintió que el material estaba más cercana para encontrar lo que buscaba.
Del cuento permanece la idea, un hombre que a través de a catalepsia trata de burlar la muerte con una orientación social, pero J. Navarro lo vio más fantástico, le agrego elementos metafísicos, absurdos y el concepto de la institucionalidad de la muerte. Para Janko El Funeral es encontrarse es una nueva forma de creación, y nueva forma de vivirla, es como un juguete que reivindica su oficio.
Ya que la gestación del proceso fue diferente, la obra va mudando de diferentes espacios, lenguaje, y demás. Navarro la escribió primeramente en español, y después en portugués, pero en el proceso aún inconcluso surgen diferentes partes y se eliminaron otras, es una obra compleja que lo desafía a él como actor, “es una obra bruja, un juguete actoral, es lo él quería hacer, bailar y actuar, quería estar en escena, quería afrontar un desafío inmenso, aprendió y me afiancé artísticamente”, nos cuenta Janco Navarro.
El funeral no se ha enterrado, y el próximo año este gran artista vuelve a Costa Rica con diferentes planes, como hacer otro monólogo, que le tomará otros 5 años, por mientras se acompaña con El Funeral, quiere dirigir y ya lo ha estado haciendo y volver a trabajar con el grupo de teatro independiente Abya Yala.